Esta medición, que cada año realizal a Secretaría de Educación Pública (SEP), está basada en los resultados que obtienen los egresados de cada plantel en sus opciones de bachillerato el examen único de Ceneval o el examen de admisión a la UNAM y que en buena medida depende de su desempeño académico, que a juicio de los profesores, cada vez es peor.
"Las nuevas generaciones vienen muy mal preparadas de la primaria, no saben leer, tienen pésima ortografía y eso retrasa el trabajo en nuestras escuelas", argumentaron los profesores de esta secundaria que está dirigida por la maestra Guillermina Hernández, quien recientemente fue transferida a otro plantel, lo que provocó una "rebelión" de los padres de familia.
La secundaria permaneció cerrada por lo menos tres días como una medida de presión para obligar a las autoridades de la SEP a reincorporar a la maestra Hernández a la Dirección de la secundaria 35. La profesora Guillermina regresó y la escuela volvió a la normalidad.
Ahí, el cuerpo docente trabaja con técnicas de estudio muy simples pero que obligan a los estudiantes a formar hábitos y a administrar su tiempo por las tardes para ayudarlos a tener un mayor aprovechamiento.
Para los maestros de esta escuela, las razones que llevaron a la escuela a salir de los tres primeros lugares de aprovechamiento a nivel Distrito Federal tienen su origen en que no todas las generaciones de estudiantes tienen la misma capacidad y en que los padres cada vez se involucran menos en los procesos de aprendizaje de sus hijos.
"Los padres dejan a sus hijos totalmente abandonados y para ellos la escuela es simplemente una guardería en donde se los tenemos que cuidar."
Pero "más allá de las disculpas", los maestros y las autoridades de este plantel están preocupados por retomar alguno de los tres primeros lugares, que hasta hace poco se disputaban siempre con las secundarias 8 y 10.
Para ello han diseñado técnicas de estudio para "enseñarles a estudiar". El objetivo, según se establece en el plan de trabajo de este plantel, es proporcionar a los alumnos las herramientas adecuadas para mejorar su rendimiento escolar, fundamentándose en la relación "aula-escuelahogar".
Para ello se ha logrado involucrar a los padres de familia a todas las actividades que realizan sus hijos, desde las tareas hasta las técnicas de estudio.
Eso fue un factor detonante para el conflicto que recientemente vivió la secundaria, donde padres y maestros se manifestaron para exigir nuevamente la presencia de la maestra Guillermina, docente con 37 años de servicio que sabe de memoria los nombres de todos los estudiantes con alguna clase de problema, ya sea de conducta o de aprovechamiento.
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